En 1 de Timoteo 2:8, Pablo le dice a Timoteo «Acuérdate de Jesucristo«, esta frase me llego mucho cuando la lei recientemente, y es que con que facilidad podemos olvidarnos de Jesucristo, incluso haciendo cosas en el nombre de Jesucristo.
Es fácil caer en activismo, es hacer cosas para Jesús, en hacer programas, conferencias, cursos y demás, el mantener obra social, el hacer muchas cosas en el nombre de Jesús, y estar tan involucrados en «la obra del Señor», pero completamente alejados del Señor de la obra.
Creo que el llamado de Pablo, esa frase, se perpetua a través de los siglos y edades, y nos hace un llamado de atención a todos aquellos que conocemos al Señor, de acordarnos siempre de Jesucristo, de no olvidar que todo es por El y para El, y sobre todo que la vida eterna es conocerle a El, es una relación, viva, vibrante y real, en cada momento y lugar.
¡Acuérdate de Jesucristo!