Muchas veces en el caminar cristiano, algunos se encuentran con que hay muchas cosas que pueden hacer para Dios, y es así como se involucran en toda actividad que puedan, conforme pasa el tiempo esas energías con que comenzaron parecieran irse, y un sentido de culpabilidad invade a muchos al creer que han perdido su amor por Dios.
Pero la verdad es que conforme haces cosas para Dios, y conformes avanzas en conocer a Dios, el hacer cosas para Dios no es suficiente, y es así como pasas a un nuevo nivel, en el cual te sientes trabajando de la mano de Dios, y haces cosas con Dios, y es así como un nuevo fuego impregna tu vida y te sientes revitalizado.
Pero aun esto no dura, y conforme avanzas llegas a otro nivel mas profundo, mas calmado, y mas asombroso, y es el de descubrir que Dios no quiere que tan solo hagas cosas para El, no quiere que tan solo hagas cosas con El, pero te quiere llevar mas allá, a reconocer que El habita en ti, y que El anhela hacer las cosas a través tuyo.
Hay muchas personas que hacen cosas para Dios, otro tanto las hacen con Dios, y hay otros pocos a través de los cuales Dios hace las cosas.