“¡Ay de ustedes, escribas y Fariseos, hipócritas que pagan el diezmo de la menta, del anís y del comino, y han descuidado los preceptos más importantes de la ley: la justicia, la misericordia y la fidelidad! Estas son las cosas que debían haber hecho, sin descuidar aquéllas.»La justicia, misericordia y fidelidad nos hablan del amor a Dios y del amor al prójimo, que hermoso es Jesús, colocando la casa en orden, en este pasaje habla fuertemente a los escribas y fariseos, aquellos que decían tener la «revelación» de Dios, pero no actuaban conforme a la revelación recibida.
Jesús ataca el asunto de fondo, muchas veces podemos cumplir con los rituales, con la asistencia a los servicios, con alzar las manos, orar y muchas cosas más, pero no hacemos justicia y misericordia para con los que nos rodean y eso es grave delante de Dios.
Oh Padre, que profundo el nivel al que nos quieres llevar, de cuidar nuestras actitudes, palabras y acciones para con los que nos rodean, porque nos conoces tan bien, sabes que nos queda fácil orar, congregarnos y demás, pero cuanto nos cuesta algunas veces perder una batalla, callar cuando tenemos la razón y amar sin condición.
Gracias por guiarnos cada vez más a pensar en aquellos que nos rodean, queremos amar como tu amas: sin condición, y perdonar como tu perdonas: aunque tengamos la razón.
-Inspirado en el devocional Tiempo con Dios del 7 de Marzo de 2016, Mateo 23:23-28