«Y se apartó de ellos como a un tiro de piedra, y poniéndose de rodillas, oraba, diciendo: Padre, si es tu voluntad, aparta de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.» Lucas 22:41-42
El caminar espiritual profundo comienza cuando dejas de querer y comienzas a creer, así te cueste lágrimas y la vida misma.